Si, definitivamente el título que le doy a esta reseña es la que describe mejor esta película. Raimi nos dejó molestos a muchos de nosotros con su majadería llamada Spider-Man 3. No estuve siguiendo de cerca sus proyectos después de la decepción. Ahora nos presenta una precuela del Mago de Oz y hay cosas qué decir al respecto. Cuidado, hay spoilers.
Creo que muchos de nosotros al pensar en precuelas de Wizard of Oz es en Wicked, la novela de Gregory Maguire y su adaptación en un musical de Broadway. Creo que muchos fans de Wicked entrarán con muchas dudas a ver Oz y saldrán haciendo las comparativas inevitables, en especial al hablar de la Bruja Malvada del Oeste y sus orígenes. Oz se enfoca más en el material en el cual está basado y hace varios homenajes a la cinta de 1939. Uno de los guiños más obvios es que el inicio de la película está en blanco y negro y con un aspect ratio de 4:3 (formato regular), para cambiar a 2.35:1 (widescreen) y color al llegar a la tierra de Oz. Tal vez aquí también hubiese aplicado el no tener el 3D durante toda la secuencia inicial.
Hablemos del protagonista, Oscar Diggs, interpretado por James Franco. El personaje está bien armado, entendemos que las circunstancias lo han hecho un hombre desconfiado, pero su llegada a Oz le sirve tanto a él como a sus habitantes. Es en Oz donde lo vemos ser el hombre en el que deseaba convertirse, donde puede lograr cosas grandiosas con lo que sabe hacer. En el mundo real no pudo hacer que la niña volviera a caminar, pero en Oz puede hacerlo con la niña de porcelana. Es muy interesante ver cómo se va encontrando con muchos elementos que lo hacen ser el hombre que conocemos en la obra original. Mención especial tiene el momento en el que ahuyenta al león, cómo se va forjando su leyenda a partir de cosas que realmente no tienen nada de espectacular.
Desafortunadamente, el resto de los personajes no obtienen suficiente desarrollo. Nunca vemos realmente la relación entre las brujas, no sabemos qué ocurrió entre Glinda y Evanora, pero sobre todo no definen bien a Theodora. Nunca vemos realmente por qué deberíamos confiar en ella y mucho menos vemos su cambio de manera sorpresiva. Este giro en la trama realmente se toma como "Ah... entonces a la mera hora ella era la mala...", cuando realmente deberíamos sentirnos mal ante su terrible destino, conocerla y saber qué es la que la lleva a convertirse en la Bruja Malvada del Oeste. Evanora tampoco nos muestra cuáles son sus intenciones para vencer a Glinda y al Mago. Solamente es mala porque debe serlo y ya. Con mayor desarrollo en esta parte, la película podría haber sido algo brillante.
Ahora, hablemos del por qué le puse ese título a la reseña. Es inevitable ver Oz como una versión para niños de Army of Darkness, la tercera entrega de Evil Dead. La estructura es la misma: Héroe viaja a un mundo que no le pertenece (Inglaterra en la Edad Media/Oz), varios dudan de él pero otros lo ven como un salvador, el héroe logra engañarlos con elementos de su mundo (escopeta y sierra/trucos de magia), el héroe es enviado a realizar pruebas (vencer a Glinda/tomar el Necronomicon), el héroe falla y todos dudan de él y finalmente el héroe decide tomar el título que le otorgaron y salva a la gente, utilizando elementos de su mundo (Sierra eléctrica, explosivos y un automóvil/trucos de magia y los conocimientos de su libro). A la escena del cementerio solamente le faltó que Oz intentara decir Klaatu Verata Nicto para obtener la varita de Glinda.
Oz The Great and Powerful es una buena película de Marzo, la cual entretiene pero que definitivamente no pudo explotar todo su potencial. Se está manejando la idea de que se realice una secuela y, siendo Disney, es muy probable que así suceda. Creo que la respuesta que muchos esperan es la siguiente: Si, está mejor que Alice in Wonderland, así que vale la pena que vayan a verla.