Antes de comenzar, abordemos un tema muy importante relacionado con esta película. Si, la película todavía no sale en México. Si, vi la película en una copia HD que descargué usando un torrent y sé que esto no es correcto. ¿Por qué lo hice? Porque esto es a lo que nos orillan las distribuidoras y los cines al no sacar las películas a tiempo. Peor aún, hacemos esto cuando no respetan al público y cambian de fecha de estreno sin previo aviso. Yo estaba dispuesto a verla a mediados de septiembre, basándome en la fecha que ya tenían fijada. Para sorpresa de muchos, la película fue movida de último minuto, desapareciendo de los portales de los cines, para después irse retrasando más y más. Es una lástima que a estas alturas sigan sin saber cómo combatir las descargas y/o copias pirata. Simplemente no nos ayudan a ayudarlos.
Dicho esto, pasemos al tema principal. En el 2005, Robert Rodriguez y Frank Miller entraron al furor de las adaptaciones de las películas de comics con Sin City. La característica principal de Sin City era su estilo visual y argumental, algo altamente influenciado por el film noir consumido por Miller a lo largo de su vida. La ciudad y personajes creados por Miller cobraban vida en la pantalla, con gran parte de las tomas extraídas directamente del comic. La secuela era algo seguro, se manejaban los nombres de Johnny Depp y Angelina Jolie para protagonizar Hell and Back y A Dame to Kill For. Pasaron los años y Rodriguez se enfocó en otros proyectos. La expectativa se enfrió bastante y Miller fue perdiendo su toque. A casi 10 años del estreno de la primera entrega, ¿Todavía quedan historias que contar en Sin City? Empecemos con los spoilers.
Just Another Saturday Night
La película inicia bastante bien con una historia corta de Marv. Lo acompañamos durante una típica noche de sábado, con su visita a Kadie's y la pelea obligada. El diálogo posee el mismo espíritu que en la anterior (siendo un One Shot que fue publicado con dichas historias) y Rodriguez agrega nuevos elementos visuales, presentándonos una buena actualización del universo de Sin City. Marv luce bastante raro durante toda la película, no sé si cambiaron de maquillista o si Mickey Rourke ha envejecido demasiado, ya que a momentos parece más una especie de abuelita diabólica. Es aún más raro que durante esta historia Marv actúa tal y como lo recordamos, pero en las siguientes no transmite la misma energía. Es como si se hubiese confiado y sintiera que ya tenía bien estudiado al personaje. La sensación que me generó fue como cuando vas al concierto de alguna banda y tocan su mayor éxito: Si, ahí está la canción, pero la tocan en automático, no hay sentimiento. Desafortunadamente, la película irá decayendo poco a poco, hasta llegar a un punto irreparable.
The Long Bad Night
Tenemos a Joseph Gordon-Levitt entrando a este universo con el papel de Johnny, un jugador que decide enfrentar al Senador Roark en una partida de poker. Es bien sabido que Frank Miller que perdió su magia desde hace años, tratando de emular el material que lo llevó a la fama. Johnny carece de cualquier tipo de elemento que lo haga especial. No posee nada que lo haga interesante. Para todos aquellos que llevan años fantaseando con ver a Gordon-Levitt como Spike Spiegel en la película de Cowboy Bebop, esta es la clara muestra de que no da el ancho. En esta historia tenemos cameos por parte de Christopher Lloyd y Lady Gaga, quienes logran aprovechar el tiempo que les dan en pantalla.
El malo principal tanto en esta historia como en la de Nancy es el Senador Roark, intentando ser parte de la conexión en el universo de Sin City junto a Marv. Este detalle se agradece, pero en la historia de Nancy le escupen a la continuidad de un modo ofensivo. En general la historia no aporta absolutamente nada, carece de elementos que la hagan atractiva, ni siquiera su plot twist resulta ser interesante.
A Dame to Kill For
El plato fuerte de esta película. La historia cuenta los eventos previos a The Big Fat Kill. Todos los rumores con respecto a Sin City 2 giraban en torno a este relato, con el nombre de Angelina Jolie siempre ligado a Ava Lord. Ahora Josh Brolin es quien encarna a Dwight. Brolin era la primera opción de Rodriguez para interpretarlo, pero fue reemplazado por Clive Owen. Ahora con la excusa de que Dwight tiene una apariencia totalmente diferente, Brolin entra al juego. Su actuación es bastante buena, dando el tono perfecto a los diálogos clave del comic. Dice el famoso "Ava... damn" tal y como me lo imaginaba al leer el comic. En lo personal sigo prefiriendo la actuación de Clive Owen. Muchos en su momento se quejaban de que decía sus líneas de manera monótona, sin embargo, ese es el estilo que se maneja en los personajes de Sin City, además de que su actuación estaba más enfocada en el aspecto físico. Brolin transmite más con su voz, pero su versión de Dwight no choca con la anterior.
Es bastante raro cuando vemos a Brolin usando el maquillaje de del Dwight-Owen. Afortunadamente se preocupó por hablar similar a él a partir de que lo vemos con su "nuevo rostro", esto se nota bastante cuando sube al convertible. De esos detalles que se le aplauden a esta historia.
En esta historia tenemos cambios visuales muy drásticos. La ausencia de los Converse rojos es un insulto total, así como la falta de color en Kadie's. Esto sumado a las marquesinas en Old Town hacen que la ciudad se sienta ajena, incluso genérica.
En cuanto a Eva Green, simplemente fue el casting perfecto. Ella tiene mucha experiencia con este tipo de personajes y siento que le dieron bastante con qué trabajar, al igual que en 300: Rise of an Empire. Cada faceta que presenta ante los hombres es completamente creíble, nunca se siente forzada o falsa. Todos aquellos que hemos tenido la mala fortuna de haber conocido a una Ava Lord sabemos que así es su modus operandi. Al igual que en 300, ella opaca al villano principal, dándonos un personaje complejo, dispuesto a hacer lo necesario con tal de alcanzar sus objetivos. Dudo mucho que Jolie pudiese dar una actuación como la de Eva Green. Este año se lució en los 2 proyectos de Frank Miller y, como lo comenté anteriormente, ella junto a Rosario Dawson lucen como si hubiesen salido de uno de sus comics.
La aparición de las chicas de Old Town se agradece, aunque hubieran aprovechado la presencia de Jaime King para grabarla junto con Marv y pasar al lado de Mort y Bob, tal y como sucede en el comic, conectando la historia con The Hard Goodbye. Jamie Chung reemplaza a Devon Aoki como Miho y, si bien no aparece demasiado en la historia, definitivamente nos deja bien claro por qué en Sucker Punch no tiene tantas escenas de acción. Devon Aoki presentaba movimientos calculados, similares a los de un depredador, listo para acabar con su presa. Chung se siente acartonada, con momentos donde supuestamente está huyendo de los disparos, pero se ve más como si estuviese jugando a mímica. Quizás nunca se ha acostumbrado a las filmaciones con pura pantalla verde. Mención especial a Juno Temple, quien actúa a la perfección todas las cosas que Dwight describe acerca de su personaje en el comic. A ausencia de esos diálogos, Temple lo captura todo y lo presenta en su actuación.
Una historia con algunos cortes a la fuente original (como es la ausencia total de Agamemnon), pero que logra sostenerse como una historia más de Sin City.
Nancy's Last Dance
Aquí es donde todo se va al carajo. Esta historia es pésima. Me da la impresión de que Jessica Alba o le aprendió las técnicas a Uma Thurman para engatuzar a Rodriguez y Miller, o simplemente aplicó con ellos el casting couch. Este relato se aleja de todo lo que hemos visto antes en Sin City para convertirse en una especie de vanity project para Alba. ¿Esa continuidad que tanto nos gusta a los fans? Se va al carajo cuando tenemos a Nancy viviendo en un departamento y a Marv aún vivo. Si recordamos la película anterior, Nancy tiene una casa bastante grande, además de que no presenta cambio alguno después de los eventos de That Yellow Bastard. Aquí la tenemos traumatizada por la muerte de Hartigan, por lo cual decide mostrarnos cómo se vería un emo en Sin City y empieza a hacer rabietas que deben convencernos del infierno por el que está pasando su personaje. Creo que lo único que mejoró considerablemente es su manera de bailar.
De nueva cuenta tenemos a Roark como el villano de la historia, pero en realidad no hace nada para recordarnos por qué se le debe temer. Lo único que aporta son sus cuadros de Junior después de sus operaciones. Me gustaría bastante tener el cuadro que adorna su oficina. Nancy hace su cosplay de Sally y recluta a Marv, quien para ese momento ya debería estar muerto. Pero no, todo sea por darle gusto a Jessica Alba. La última vez que la ve, ella lo recibe en su casa para darle asilo a Wendy y no, no tiene el cabello largo ni las cicatrices. Aquí no, ahora él llega para ayudarla en su vendetta.
"Te ves ardiente", le dice Marv nervioso, para enaltecer más a Nancy. Toda la historia parece un fanfic escrito por una fan de Frank Miller y Tim Burton, desahogando sus fantasias cual Mary Sue. ¿Qué aporta esta historia? Absolutamente nada, al contrario, es una pésima manera de terminar la película, da la impresión de que ya no queda más que contar acerca de Sin City. Gran parte de las malas calificaciones que ha recibido son gracias a Nancy's Last Dance.
Sin City A Dame to Kill For no alcanza a su predecesora, teniendo momentos los cuales muestran la evolución que podría haber tenido, así como el sabor que presenta la primera entrega. La larga espera y que Miller sea víctima de la Teoría Unificadora de Vida de Sick Boy tienen mucho que ver con la falta de éxito de A Dame to Kill For.